Curiosamente,
es imposible el no hablar de los medios en la actualidad, sin pensar en el
pensamiento de McLuhan y su comparativa tan adelantada con una sociedad donde
la comunicación audiovisual tendría un cambio tan importante, ocupando espacios
determinantes en el hogar y metiéndose de lleno en nuestra vida cotidiana.
Desde
que los medios de comunicación empezaron a adentrarse en la vida diaria, poco a
poco nos hemos hecho dependientes y necesitados de estar informados y
actualizados tecnológicamente, en su momento hablando de la aldea global el
punto clave era la capacidad de percibir hechos que no teníamos al
alcance inmediato como algo que estaba ocurriéndonos, el como ese mensaje ya es
nuestro y esa experiencia ya forma parte de nuestras vidas, sin pensar que ese
pequeño mensaje que recibimos fue preseleccionado de un millón de mensajes mas.
Como siempre buscamos la independencia y lejanía de ser como los demás.
Si
nos ponemos a analizar, el punto de vista de McLuhan a un toque mas modernista,
en definitiva, ya no es nada descabellado pensar que cada vez que hablamos con
otra persona por medio de nuestra tecnología, la sentimos casi a un nivel
interpersonal directo.
Todo
esto ha ocasionado que la cultura se hibridice, que la segmentación y
valoración de gustos individuales crezca y no solo eso, el mensaje se ha vuelto
totalmente tecnológico.
Ya
el simple hecho de educar esta muy de la mano con la tecnología y por qué no la
ruptura de la Brecha Digital de la que habla Manuel Castells "Los medios
de comunicación han perdido el monopolio de la información".
Es
muy interesante la postura que se ha tomado, y mas con la Web 2.0, donde la
persona se ha vuelto parte del medio comunicador, los videoblogers se han
transformado en conferencistas y cualquier persona con una cámara y no
precisamente profesional es capaz de generar contenido visto por millones y
dándole vuelta al mundo en menos de unas horas modificando posturas y formas de
pensar.
En
otra entrevista Castells comentó "También los profesores hemos perdido ese
poder. Mis alumnos me siguen por Google y como diga una tontería me cazan
enseguida". Este punto me pareció importante de rescatar ya que, demuestra
la humanización en diversos momentos de personas que considerábamos
inalcanzables, eso también ha hecho que la gente deje de endiosar a un artista
(obviamente no todos pero ya hay mas personas que lo hacen) o en su caso una
persona tan preparada y atreverse a interactuar con el por medio de las redes
sociales.
Desde
el momento en que tu grupo favorito te sigue en Twitter y te comenta o le da
favorito a alguno de tus pensamientos escritos en esa red social, uno se siente
mas cerca, curiosamente ese es el efecto que tiene el internet y nuestro
cerebro.
Según
estudios, el hablar con una persona por medio de la computadora, cerebralmente
hablando emite la misma sensación que si la tuviéramos de frente.
A mi
parecer, eso es algo que recientemente hemos aprendido y no sé si evolucionado
en nuestra manera de vivir, ya que nuestro habitum ha cambiado deliberadamente
gracias a estos estímulos tecnológicos y mediáticos, donde el FaceTime que te
presentan de la manera mas maravillosa, te convence y al usarlo seguido te
refleja la cercanía que tanto soñaste tener con esa persona que es tu verdadero
amor cruzando todo el Atlántico.
Es
curioso el denotar, como la construcción de necesidades basadas en la
hibridación de productos puede ser una bomba del tiempo para la evolución en la
construcción de mensajes, por una parte los teléfonos celulares útiles para que
las sociedades se comunicaras, coqueteara, o chismearan entre sí mas rápido y el
internet un medio que no es controlado por nadie pero finalmente quien sepa
expresar su pensar en esa tierra desconocida sin leyes es capaz de hacer que
sus ideas rueden por el mundo.
Así
es como tenemos ahora, los teléfonos inteligentes, que unen lo mejor de el
mundo individual y el masivo, creando aplicaciones y plataformas listas para
lograr que un adolescente exprese su mas profundo análisis en 140 caracteres,
mientras cuelga la foto que mas guapo le hace sentir en su perfil de likes en
Facebook y escribe una reflexión religiosa en la página de Facebook de su
familia.
Curioso,
nos hemos hecho personas tan multifacéticas que no me sorprendería un grado
alto de esquizofrenia en unos años más. Por la enorme cantidad de
personalidades que se tienen en cada aplicación y plataforma que existe en
internet.
A
partir de todo esto, se han creado nuevos lenguajes, nuevos métodos de
comunicación y de emisión de mensajes, los receptores ya no son los mismos, las
personas ya no compran el mismo tipo de mensaje. De alguna manera las
necesidades han orillado también a las empresas a tecnologizarse o unirse al
rezago poblacional que cada día se hace menor, esas personas que se niegan a
entrar de lleno a la migración tecnológica pero como dice Castells, la brecha
tecnológica dejará de existir cuando su generación se acabe. Ya un niño de 4
años sabe manejar perfectamente un celular.
Las
personas siempre hemos tenido esa necesidad de sentirnos escuchados, ahora
leídos, o vistos, cada aplicación social esta diseñada para eso, para hacer
nuestro sueño de popularidad y comprensión realidad, cuantas personas no hablan
en persona pero cuando están en algún chat, Facebook o incluso en Whats App son
las personas mas divertidas y locas del mundo. Ya las posibilidades son
infinitas, videos cortos, mensajes cortos, fotografías para expresar ideas,
pero no solo eso, estamos en una masa invidualista que no se ha dado cuenta que
lejos de ser especial es uno mas del montón que se siente triste si su
publicación no ha tenido el éxito deseado y nadie lo leyó.
Pertenencia,
pertenencia en todos lados, somos seres humanos que siempre han necesitado
co-relacionarse y sentir aceptación de otros.
Ya
estamos tan metidos en el mundo digital, que después de levantarte en las
mañanas lo primero que lees, actualizas o te informa es la red social de tu
preferencia, ya no es verte al espejo y checar que tal habías despertado, es
que tal había despertado tu perfil virtual.
Lo
curioso es que cada día nos creemos mas parte de el común denominador, de la sociedad,
que formamos parte de algo que yo y mi amigo Chino somos parte de un reflejo
social de una aldea donde no hay frontera alguna, donde existe solo una cultura
la nuestra la que tu adoptas, nos sentimos tan únicos e independientes pero al
mismo tiempo queremos ser como todos los demás, es como una constante lucha
entre ser masa o ser uno mismo. Pero siempre he pensado que todos actuamos como
masa en determinado campo de nuestra vida, nadie esta exento de no pensar.
La
información existe, la generación de contenidos más, las ideas que tuve a los
12 años que mandé por email están en algún lugar de la internet, navegando,
naufragando, sin más, es como la eternidad de las ideas.
Podrá
movilizar masas, cambiar una campaña política, materializar ideas radicales
incluso con las impresoras 3D hacer posible lo inexistente, lo que solo
teníamos en nuestros archivos. Pero esta herramienta tan de doble filo, nos
deja pensando en si cada día somos mas humanos o mas máquinas, en si la mayor
parte de la gente que entra desde sus dispositivos entran por entretenimiento
como una televisión mas, o existen mas personas entrando para crear contenido y
consumir información que servirá para culturizar y crear personas mas
racionales o con un análisis crítico mas basto.
Los
usuarios son dueños de este medio, pero de alguna manera todos estamos ligados
ya sea por un hipervínculo o por un hashtag, siempre existirá otro perfil como
el mío en el planeta con Facebook, no solo estamos nosotros, existen mas como
Tú o como Yo en la red.
Podrás
formar parte del séquito de perdedores que solo entran a entretenerse o quizás
ya todos estamos vinculados al entretenimiento, aprendizaje y expresión
generando contenidos en un mismo sitio.
El
poder de los medios siempre ha sido algo que pocos conocen, que pocos tienen el
real análisis de lo fuerte que puede ser aprender a usarlo y nosotros como
sociedad estamos acostumbrados a no pensar para qué sirve, simplemente
utilizarlo sin pensar. Socialmente hablando nosotros siempre seremos movidos
por los medios, el problema o la incógnita aquí es qué pasa cuando este medio
lo mueve un usuario, pero no un usuario como los demás, sino tú mismo.